Artículo de Diario HOY, 6 de Septiembre de 2017.
El acoso o extorsión por parte de las empresas a los deudores es una constante que sigue vigente, tanto en casas de créditos, telefonías celulares, entre otros. Existen algunas recomendaciones a tener en cuenta en caso de ser víctima de reclamos por una deuda impaga.
Hace cuestión de unos meses tomó notoriedad un audio en el que se escucha a una cobradora de la empresa Inverfin que maltrata y extorsiona a un cliente a fin de que el mismo se acerque a cancelar una cuenta pendiente.
Este es uno de los tantos casos que se registran a diario, en el que empresas (ya sean casas de crédito, electrodomésticos, telefonías celulares, etc.) se encargan de insistir y coaccionar a los clientes, llegando inclusive a ciertos extremos, con tal de cancelar alguna deuda impaga.
Edward Arca, director del Centro de Atención al Deudor, en entrevista con la 970 AM habló sobre este tema y mencionó que, luego de que la atención mediática se haya centrado en el caso Inverfin, ya no se denunciaron este tipo de agresiones verbales, aunque los otros medios de “agobio” a los acreedores siguen vigentes, como notas, mensajes, notificaciones en lugares de trabajo, etc.
Uno de los principales problemas es la falta de información, señaló. Por ello, las personas que frecuentemente son extorsionadas no saben cómo actuar en situaciones similares cuando les exigen el pago de una deuda.
Arca también habló sobre este mismo tema en el programa televisivo “La Caja Negra” emitido por Unicanal, en donde refirió que “el esquema está preparado para hacer caer al deudor”, dando a entender que las mismas empresas se encargan de que complicar la situación de la persona.
“La información es la mejor herramienta que puede tener una persona que tiene deudas a fin de defenderse, saber cuáles son sus derechos y así poder actuar ante determinadas situaciones”, expresó el director del Centro de Atención al Deudor.
Uno de los casos más frecuentes es el de los pagarés que siguen siendo renovados por las propias empresas a través de los “pactos” o contratos de renovación de deudas, es decir, un pagaré que tiene una vigencia de 4 años (tiempo en el que prescribe) vuelve a ser “habilitado”, por lo tanto, la persona vuelve a tener una deuda nueva sin su consentimiento.
Ante este tipo de situaciones, Arca indicó que el primer paso a seguir es exigir a la empresa que proporcione la liquidación actualizada a la fecha, de manera a saber si el documento está prescrito o no, además de que esté incluida toda la información detallada de la deuda.
En segundo lugar, se debe solicitar la exhibición del documento donde consta la deuda porque en las transferencias de cartera o el paso “de mano en mano” entre abogados los documentos suelen extraviarse. “El deudor tiene que exigir la exhibición del documento y verificar si ese pagaré le corresponde y si la firma estampada es o no la suya”, puntualizó.
Recomendó a todas las personas que tengan algún tipo de duda o consulta sobre este tema que puedan contactarse con el Centro de Atención al Deudor (Tte. Fariña 1023 entre Brasil y EEUU) al (021) 204 572 - (021) 233 943 o el celular (0991) 724 623. También se encuentra habilitada la página en Facebook y el sitio web www.atencionaldeudor.com.py/.
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